[Resumen del Manga] Saga del Jinchuu (Parte 13/13)

Finalmente, el combate a muerte entre Kenshin y Enishi comienza. De inmediato, el hermano menor de Tomoe hace gala de su enorme poder destructivo, atacando a Kenshin con su Wattoujutsu y cortando en el camino algunos árboles. Kenshin aprovecha este momento para atacar usando una de sus técnicas más poderosas: el Kuzu Ryu Sen; no obstante, Enishi logra leer sus movimientos y con su espada se las arregla para bloquear cada uno de los 9 ataques del Kuzu Ryu Sen. Finalmente, las espadas de ambos chocan y ambos luchadores son lanzados por el aire tras recibir la onda provocada por el violento impacto entre ambas espadas.

Desde cierta distancia, Misao observa sorprendida la pelea, mientras Aoshi y Yahiko le explican lo que ha sucedido. Megumi pregunta si acaso Enishi no se ha vuelto más fuerte, a lo que Sanosuke contesta que, ya que en esta ocasión Enishi está decidido a matar a Kenshin (en la pelea del dojo, esa no era su intención), sus ataques se han vuelto más certeros y poderosos. Sin embargo, como Kenshin logró superar el ‘infierno en vida’ que Enishi preparó para él, su fuerza de voluntad es más fuerte y por lo tanto, los golpes del mismo Kenshin serán también más certeros y fuertes que en ocasiones anteriores. Por otro lado, Kaoru, mientras observa a su amado pelear, nota que algo ha cambiado en él y se pregunta si finalmente ha hallado la respuesta que tanto había estado buscando. 

Mientras tanto, la pelea continúa, con un curso no muy alentador para Kenshin. Enishi se muestra  como un especialista en el combate aéreo (puede impulsarse aun estando en el aire) y logra derrotar el famoso Ryu Tsui Sen. Kenshin intenta utilizar todas sus técnicas pero estas son fácilmente derrotadas por Enishi. Incluso el Kuzu Ryu Sen es completamente derrotado. Kaoru teme por la vida de Kenshin, ya que cree que la fuente de poder de Enishi es un odio que no puede ser parado por nada. Mientras él mantenga esos fuertes sentimientos, se hará cada vez más fuerte. Si Kenshin no logra superar el remordimiento por las vidas que tomó, nunca podrá hacerle frente a Enishi. Mientras Kaoru se pregunta esto, Kenshin se pone de pie y sorprende a todos con una declaración que pone en manifiesto su férrea voluntad. Kenshin no piensa rendirse. No piensa sucumbir ante la voluntad de Enishi porque finalmente ha encontrado la respuesta que buscaba, la forma de redimirse de los pecados que cometió en el pasado.  Estas palabras no hacen más que encolerizar a Enishi que, luego de golpearlo, le entrega su espada y le pide que tome su vida para redimir sus pecados. Kenshin le devuelve la espada y le dice que su muerte no es suficiente para pagar por sus crímenes. El ex hitokiri ha decidido seguir viviendo y luchando por las personas que lo necesitan, hasta el final, cargando sobre sus hombros el peso de sus pecados. Mientras pueda hallar la forma de hacer feliz a alguien, seguirá luchando con su espada y su corazón, sin importar que tan doloroso sea el camino. Enishi le pregunta si cree que eso hará que Tomoe le perdone y Kenshin le responde que, tras descubrir esa verdad, finalmente pudo ver al espíritu de Tomoe sonriéndole. Entonces, Kenshin le pregunta a Enishi si él también puede verla sonreír. Al buscar a la Tomoe que lleva en su interior, Enishi se da cuenta que no le sonríe. Encolerizado, decide que pase lo que pase, matará a Kenshin y se asegurará que los dos no se encuentren en el paraíso. 

Con un grito atronador, Enishi decide liberar todo su poder y al hacerlo, logra que los conductos nerviosos de su cuerpo se hagan visibles. Pero no sólo su aspecto cambia producto de esto, sino que su velocidad y fuerza aumentan dramáticamente, dejando atónitos a todos los presentes. Además, sus sentidos se han vuelto más agudos y es capaz de percibir cada movimiento que Kenshin realiza con mayor facilidad.  Todo parece indicar que Enishi será el vencedor e incluso Sanosuke y Aoshi se preparan para intervenir en la batalla, pero son detenidos por Yahiko, quien sigue creyendo en Kenshin. Pese a las heridas que su cuerpo ha recibido, Kenshin se mantiene en pie, con su voluntad firme.  Enishi decide cargar nuevamente contra él, pero Himura lo sorprende con una nueva técnica. Envainando rápidamente su espada, genera un sonido apenas perceptible (sólo Aoshi y Misao, que tienen un oído super sensible debido al entrenamiento Oniwabanshuu, logran oírlo) que logra afectar gravemente a Enishi, cuyo sentido del oído se ha vuelto más agudo. Esta nueva técnica,  bautizada como Ryu Mei Sen,  logra no sólo afectar el oído de Enishi sino también su equilibrio. El hermano de Tomoe toma entonces la dolorosa decisión de dañar su propio aparato auditivo al ingresar sus dedos en su oído, para así hacerse inmune al ataque de Kenshin. Desesperado, Enishi retoma su ataque contra Kenshin, aunque no logra acertar. Mientras ataca, le increpa al pelirrojo que lo único que él quería proteger ya ha sido tomado por él, palabras que generan cierto impacto en Kenshin. Ambos se separan y se preparan para realizar su última movida:  Enishi adopta la postura de su Ko Fuku Ze Tou Sei, mientras que Kenshin envaina su espada y se prepara para realizar el Amakakeru Ryu no Hirameki.  

Ante la atenta mirada de todos, Kenshin y Enishi inician su ataque final. Todos contienen la respiración y se preguntan si esta vez la máxima técnica del Hiten Mitsurugi Ryuu tendrá éxito, ya que fue fácilmente derrotada la última vez que se enfrentó al Ko Fuku Ze Tou Sei de Enishi. Sin embargo, esta vez es diferente. Al haber encontrado la respuesta que tanto había buscado, el paso adicional, necesario para el Amakakeru, es dado con más confianza, otorgándole mayor poder al ataque de Kenshin. Enishi advierte esto pero ya es muy tarde para reaccionar. Su espada termina quebrándose en dos. Sin su espada, y con el brazo lastimado, Enishi es incapaz de continuar el combate. No obstante, el hermano de Tomoe no está dispuesto a rendirse y cuando iba a atacar a Kenshin, un disparo, que hiere al pelirrojo en el hombro, llama la atención de todos. Hei Shin ha logrado reponerse y está dispuesto a matar a todos los presentes. Desesperada, Kaoru se interpone entre Kenshin y el enemigo, en un intento por protegerlo, aunque se expone a recibir un balazo. Enishi, al ver como la joven pone en riesgo su vida para salvar a Kenshin, no puede evitar recordar a su querida hermana Tomoe, que protegió al hombre que amaba del mismo modo, y se abalanza contra Heishin. De un solo golpe, logra derribarlo, pero cuando estaba dispuesto a tomar su vida, Kenshin lo detiene y le advierte que si comete más crímenes, perderá la sonrisa de Tomoe para siempre. Además también le agradece por haber protegido a Kaoru. Enishi se deja caer en el suelo y entre lágrimas se lamenta que a quien en realidad quería proteger era a Tomoe. Con una sonrisa, Kaoru recibe a Kenshin, que se acerca para preguntarle si se encuentra bien. Kaoru sabe que la decisión que ha tomado Kenshin lo lleva a continuar luchando en una dura vida que no sabe si traerá retribuciones o un perdón a sus pecados, pero mientras él continúe por ese camino, ella permanecerá siempre a su lado. 

***

La batalla entre Kenshin y Enishi ha finalizado. Al cabo de unos minutos, los policías llegan a la isla y se llevan a Enishi arrestado. Antes de que el hermano de Tomoe suba al barco, Kaoru le pide a Misao el diario que le encargó traer desde Kyoto. Con la aprobación de Kenshin, Kaoru decide entregarle a Enishi el diario de Tomoe, donde residen los últimos pensamientos y sentimientos de su querida hermana. Aquella fue la última vez que Kenshin y los demás vieron a Enishi Yukishiro. Cuando todos llegaron a la Bahía de Tokyo, Enishi había desaparecido junto al diario de su hermana. 

Algunos días después, Misao y los demás conversan acerca del paradero de Enishi. Aoshi les cuenta que, según Saitou, la policía no había dado con su paradero pero, dado el mal estado en el que se encontraba Enishi, no valía la pena buscarlo. Yahiko, envuelto en vendas y aún convaleciente, los interrumpe y les pregunta por el paradero de Kenshin y Kaoru, que habían decidido viajar a Kyoto para visitar la tumba de Tomoe. Una vez ahí, los dos descubren que alguien había dejado flores en su tumba. Al principio se preguntan si el responsable era Enishi, pero pronto Kenshin se da cuenta que quien había visitado la tumba había sido Oibore, el padre de Tomoe. Kaoru le pregunta a Kenshin si cree que Enishi haya decidido suicidarse y él cree que no, que ahora que el tiempo ha empezado a correr nuevamente para él, Enishi buscará una respuesta para redimirse de sus propios pecados a través de la vida y no de la muerte, y que si quiere volver a ver a Tomoe sonreír, deberá buscar una manera de sonreír también. Además, agrega que, ya que la verdadera Tomoe es más gentil que nadie, ella seguirá cuidando a su hermano pase lo que pase.

A varios kilómetros de distancia, en el Rakuninmura, Oibore se encuentra con un nuevo compañero que le resulta familiar. Se trata de Enishi, que ha ido a parar al lugar de los muertos en vida, sosteniendo con fuerza el diario de su hermana. Al ver esto, Oibore cree que al igual que Kenshin, Enishi no pertenece a ese lugar y algún día podrá ponerse de pie y continuar con su vida. Hasta que llegue ese momento, puede descansar tranquilo en el Rakuninmura. 

*** 

Finalmente, los vientos de otoño empiezan a correr y nuestros queridos personajes empiezan a separarse. La primera es Megumi, que ha decidido volver a Aizu. Pero antes de partir, la joven doctora le advierte a Kenshin sobre su condición física, la cual empieza a deteriorarse. En cuatro o cinco años, Kenshin no podrá volver a usar el Hiten Mitsurugi Ryu.

 Luego de escucharla, Kenshin decide que ha llegado el momento de zanjar ciertos asuntos, por lo que opta por enviarle una carta a Saitou para retarlo a un último combate. Sin embargo, Saitou decide rechazar el combate ya que la persona a la que él quería enfrentar era Hitokiri Battousai, y esa persona no existe más. No está interesado en enfrentar a Kenshin, el vagabundo que ha decidido no volver a matar. Después de esto, el lobo de Mibu es transferido a otra estación y nunca más vuelve a ser visto por Kaoru y los demás. Poco después, Aoshi decide partir también junto con Misao, no sin antes cumplir su promesa de realizar la ceremonia del té junto con Kenshin. Aunque en un principio Misao quiere quedarse, pronto se da cuenta que el motivo por el cual Aoshi quería apresurar su partida era que quería cambiar el lugar donde reposaban los Oniwabanshuu antes del invierno. Tras entender los sentimientos de su amado, Misao decide despedirse ella también de Kenshin y marcharse junto a Aoshi. 

Días después, luego de despedir  a Megumi en la estación, un grupo de policías empieza a perseguir a Sanosuke por el incidente ocurrido en Shinshuu, por lo que nuestro peleador callejero no tiene otra opción más que despedirse del Kenshin-gumi y seguir su camino. Poco después, Kenshin y los demás se enteran de lo ocurrido por el jefe de policía, quien lamentablemente no puede hacer nada para ayudar a Sano ya que una persona importante como un Isshin Shishi está implicada en el asunto. Por supuesto que Kenshin podría usar sus influencias como Hitokiri Battousai, pero esto molestaría a Sanosuke, por lo que decide no hacerlo. Justo cuando discuten esto, un amigo de Sano llega al dojo Kamiya para contarles que Sanosuke planea dejar Japón, pero que antes quiere despedirse de sus amigos. Bajo la oscuridad de la noche, todos acuden al encuentro de Sanosuke, que utilizando un bote, planea alcanzar un barco con el que ya ha hecho arreglos para que lo dejen viajar. De esta manera, Sanosuke se despide, aunque promete volver para ver a los hijos de Kenshin (comentario que hace que Kaoru se ruborice). Como Kenshin había dicho, finalmente todos han tomado sus propios caminos.

***

Año 15 de la Era Meiji…

Los años han pasado y los personajes han crecido. Yahiko se ha convertido en todo un maestro de la escuela Kamiya Kasshin y sin problemas, se deshace de unos maleantes que molestaban a Tsubame. Más tarde, Yahiko acude al dojo, ya que Kenshin lo había llamado. Ahí se encuentra con la feliz pareja y con el pequeño Kenji. Pero no se trata de una simple visita social. Yahiko, que acaba de cumplir quince años, debe celebrar que se ha convertido en un hombre (tradicionalmente, a esta edad se consideraba que un chico se convertía en hombre), por lo que Kenshin lo reta a un duelo de un solo golpe. Pese a que se supone que el Hiten Mitsurugi se ha vuelto inefectivo, Yahiko puede percibir la fortaleza en el espíritu de Kenshin, quien en algún momento fue el espadachín más fuerte de todo Japón. Armándose de valor y determinación, Yahiko se dispone a atacar a Kenshin. Kaoru da la señal y ambos guerreros realizan su movimiento. Como resultado, ambos terminan asestando su golpe en simultáneo, pero el ataque de Kenshin parece haber surtido mayor efecto. Yahiko cae de rodillas en el suelo, adolorido por el golpe recibido, aunque recibe las felicitaciones de Kenshin por su ataque. Entonces, como regalo por sus quince años, Kenshin decide entregarle la Sakabatou. Con esto, Kenshin deja atrás muchas cosas, pero no cree que eso signifique que las luchas hayan terminado. Él nunca dejará de pelear por sus creencias, sea de la forma que sea. Kaoru le da la razón aunque le pide que, mientras, sólo se preocupe en descansar. Kenshin responde con una sonrisa. Finalmente ha encontrado la paz que tanto buscaba.

FIN

Notas finales.- 

Antes que nada quería disculparme por haber tardado tanto en publicar esta última parte. Por motivos personales y de estudio, no he podido actualizar esta sección hasta ahora. Cuando releía el manga para escribir esta parte, me sentí triste por como todos empezaban a tomar caminos distintos. Ojala no fuera así, pero así es la vida ¿no? Sin duda hay muchas lecciones que este hermoso manga nos puede dejar en la vida. Espero que hayan disfrutado los resúmenes. Gracias a uds por leerlos y a Moon Slayer por ayudarme y permitir que esto llegara hasta aquí. Saludos.