domingo, 29 de enero de 2012

[Resumen del Manga] Saga del Jinchuu (Parte 4/?)



Me disculpo por la demora de este capítulo, y porque además es un poco corto. Los próximos serán más largos, lo prometo.

Mientras Kenshin piensa en cómo debe reaccionar, luego de haber sido descubierto, la misteriosa muchacha se desmaya ante sus ojos. Tras dudar un poco, Kenshin decide llevarla a la posada donde se esconden los miembros de la facción Choushuu, no sin antes advertir el aroma a ciruela blanca que despide la muchacha. Al llegar a la posada, luego de recibir una mirada llena de sospecha por parte de la dueña de la posada, Kenshin decide  llevarla  a su habitación para que pueda descansar. 


A la mañana siguiente, el pelirrojo hitokiri se sorprende al ver que la muchacha se ha levantado y no está en su habitación. Alarmado, sale a buscarla y la encuentra ayudando en la posada. Al preguntarle su nombre, esta le contesta: Tomoe, Yukishiro Tomoe.

La muchacha causa revuelo entre los compañeros de Kenshin, que creen que Tomoe es la mujer del pelirrojo. El más entusiasmado parece Iizuka, uno de los encargados de ‘supervisar’ los asesinatos en Choushuu. Para exasperación de Kenshin, Tomoe actúa con total tranquilidad y se presenta de la forma más educada ante los compañeros del hitokiri, los cuales están encantados con la belleza de la mujer.

Poco más tarde, Kenshin se reúne con Katsura, a quien le comenta el reciente incidente que tuvo con el asesino del Bakufu. Ambos llegan a la conclusión de que hay un traidor en el grupo, el cual esta filtrando la información. Luego, Kenshin tiene una conversación con Tomoe, en donde le pregunta si su familia no estaría preocupada por ella. La joven mujer responde que, si tuviera familia, no se la pasaría bebiendo en bares sola. Tomoe además le pregunta por qué simplemente no se deshace de ella, del mismo modo que se deshizo de su enemigo la noche anterior, a lo que Kenshin responde que, sin importar lo que ella piense, el lucha para construir una nueva era y que sus enemigos son los miembros del Bakufu y que además, no atacaría a alguien desarmado, aún si fuera su enemigo. Tomoe le pregunta entonces, que si ella tuviera una espada, ¿él la atacaría?



Los días transcurren y Tomoe se ha asentado en la posada. Kenshin, por otro lado, sigue cometiendo más y más asesinatos. Los miembros del clan deciden investigar a Tomoe, ya que podría ser una espía. Iizuka es el encargado de la investigación y pronto llega a la conclusión de que la muchacha es simplemente un “gato perdido”, posiblemente hija de algún samurai que por motivos desconocidos se alejó de su familia. Iizuka le cuenta todo esto a Katsura y además añade que existen ciertos rumores de que la habilidad de Kenshin se estaría deteriorando debido a la presencia de Tomoe. Por este motivo, el líder de Choushuu decide conversar con Tomoe y contarle un poco acerca de los motivos del clan y de la labor de Kenshin y el duro peso que este tiene que llevar sobre sus hombros. 


Desde entonces, Tomoe no deja de pensar en Kenshin y en las palabras de Katsura. Un día, la joven descubre al joven hitokiri profundamente dormido, con la espalda acostada sobre la pared. Al acercarse para cubrirlo con una manta, se queda observando su rostro y se queda sorprendida por lo joven que se ve. De pronto, Kenshin se despierta y prácticamente por instinto, sostiene a Tomoe de su kimono y desenvaina su katana hacia ella. Al instante se da cuenta de su error y la suelta. Luego de disculparse, le pide que por favor se aleje de él, antes de que resulte lastimada. Tomoe, sin embargo, decide no irse y le dice que se quedará un poco más, para ayudarlo a suprimir la locura que amenazaba con apoderarse de él. Kenshin entonces le da una respuesta a la pregunta que Tomoe le había formulado días atrás, acerca de que si se atrevería a matarla si ella tuviera una espada. Kenshin le dice que bajo ninguna circunstancia, él le haría daño.

Finalmente llega el festival de Gion, uno de los más importantes (sino el más importante) de la ciudad de Kyoto, el cual dura prácticamente un mes. Durante estas festividades, los miembros del clan Choushuu habían decidido reunirse en la posada Ikeda , donde discutirían los detalles de un importante plan que pensaban llevar a cabo. Sin embargo, son descubiertos por los miembros del Shinsengumi, quienes asesinan a varios rebeldes y apresan a otros. Katsura Kogoro logra salvarse por poco. Tras enterarse de lo sucedido en Ikedaya, Kenshin decide acudir, pero es detenido por Iizuka, quien le dice que ya es demasiado tarde para hacer algo. Días después, a manera de represalia, se desata la rebelión Kinmon. Los rebeldes prenden fuego a la ciudad de Kyoto y muchas casas son arrasadas por las llamas. El desenlace de la batalla trae como consecuencia la pérdida de 400 hombres del movimiento pro-imperialista, mientras que solo 18 soldados del Bakufu perdieron sus vidas. Este es un duro revés para los miembros de la facción Choushuu, que se ven obligados a escapar de Kyoto y esconderse, para evitar ser apresados por los hombres del shogun. Es en este contexto que Katsura le pide a Tomoe que huya junto con Kenshin y que simule ser su esposa, después de todo, una joven pareja de recién casados atraería menos sospechosas que un viajero solitario. Es así como Kenshin, de 15 años, y Tomoe, de 18, huyen juntos de Kyoto, como una pareja de jóvenes esposos. 

 Continuará...

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